jueves, 13 de enero de 2011

Perdedores y derrotados

Este mundo que nos toca vivir no ha sido hecho por los perdedores
ni por los derrotados

Uno suele recordar esas frases hechas y esos clichés que quedan activados como norma. En este caso, lo primero que viene a la memoria es aquella
que dice “nadie se acuerda de los segundos”
Máxima que se aplica generalmente en el rubro deportivo pero también la podemos llevar a la política
y a los medios de comunicación

Otra frase hecha que se suele repetir es “de las derrotas siempre se aprende”…

Lo que ninguna de las dos frases grafica es el sentimiento de quienes se encuentran inmersos en ellas
No contentos con eso, se suele adjetivar erróneamente y descalificadoramente a los perdedores y a los derrotados como “fracasados”

La pregunta que se suele hacer uno ante tamañas afirmaciones que vemos, leemos o escuchamos a diario es ¿Desde que lógica o estatura moral o experiencia de vida alguien puede tildar de “fracasado” a una persona?

Decía un minuto antes que este mundo no fue hecho por los perdedores ni por los fracasados, pero tampoco los contiene ni los contempla

La derrota tiene componentes que la victoria ni siquiera imagina
La derrota tiene implicancias, tiene desencadenantes, tiene consecuencias
La derrota tiene dolor, tiene lágrimas, tiene sangre
La derrota es incomprendida
La derrota es humillante, es carroñera
La derrota es tan cruel que si la victoria supiera de esa crueldad,
se dejaría empatar

Quieren escuchar otra frase hecha?
“La esperanza es lo ultimo que se pierde”
No seria difícil de entender que para los perdedores y los derrotados la esperanza es lo primero que pierden.
No hay manera de superarlo.
Una derrota consumada no tiene forma de ser cambiada.
Después viene todo lo demás: la pérdida de autoestima,
de confianza, de coraje.
Pero primero viene la esperanza

Los libros también dicen que nada en este mundo fue hecho por los perdedores ni por los fracasados…
es más, los libros los ignoran

Por eso este pequeño espacio quiso hablar de ellos
Pero siempre teniendo en cuenta que, también,
estamos hablando de nosotros...